Durante varios meses, en un café parisino, William Faulkner (New Albany, Mississippi, 1897-1962) observó a un hombre beber vino blanco todas las tardes. Se trataba de James Joyce, a quien el narrador estadunidense admiraba profundamente. Faulkner era tan tímido que jamás cruzó palabra con el autor de Ulises. Junto a James Joyce, Jorge Luis Borges, Marcel Proust, Virginia Woolf y Franz Kafka, el narrador estadunidense es uno de lo máximos innovadores de la literatura universal durante el siglo XX.